domingo, 21 de agosto de 2011

En lo del parque

La decisión de ser corajuda para salir, de exponernos, y de fortalecer a toda alerta los sentidos... Porque si yo tropiezo no me caigo sola y no quiero eso, así que al cruzar la puerta me transformo en el superhéroe que se mete a todo el mundo en los bolsillos, que en vez de usar capa municiona su mochila, que luchará por la paz , la justicia, y que vencerá villanos con el puño izquierdo de hierro.

Entonces nos esperan las momos y los ñiños eduardos, tanta gente que espera a tanta otras gentes para luego perderse entre la masa. Subir alto y ver el mar sólido sentada desde el verde pasto amable y robarle zol al zol, sin descaro ni vergüenza, porque es gratis.

Se sintió tan reconfortada, emocionda, lo sabe por piel. Se sintió tan feliz de presenciar el acontecimiento mismo, de estar, de ser parte, de cantar con los más viejos y aprender a refrescarse de y con los niños, de alzar la voz tan alto como los cometas mostrando sus colores, de ver esos ojitos que la miraban con atención y tranquilidad, de darle a otro cuerpo el aura misma del ahora, de la herencia.

Los tres mosqueteros hacen justicia y enmancipan sus mentes, yo hago justicia y digo paso... porque mis pasos ahora priorizan la tierra.

Comprendo de una puta vez que ya encontré lo que andaba buscando, que soy feliz , que estoy limpia, que me quité del camino los prejuicios, la vanidad y el egoísmo con la misma fiereza con que los perros se quitan las pulgas y que ahora puedo amar a los demás con lo justo.

Por eso hice salud, agarré la lata de cerveza y bebí el sorbo más delicioso que probé en años.

lunes, 15 de agosto de 2011

de apariciones

Terminé por desayunar y recordé heber soñado algo extraño, hice un poco el esfuerzo de intentar recordar qué fue y claro, el asensor subía muy rápido al piso 21 que casi me hizo devolver las tripas por la boca y que al mirarlo desde lejos juré no volverme a subir, vértigo y miedo.
Que querían culpar a una mina poco importante para mí de haberse quedado escondida por la noche para robar en el hotel, y que al otro día ella negaba la intensión de robar pero no la de estar de amante del jefe.
Caminé por el estacionamiento del Alto las condes y al entrar al auto estaba en Nashville, y vi lo mismo que hace unos años atrás allá, un auto atravezado por una estaca de hielo... pero no estaba nevando, había manso zol.
llegué a casa de unos tíos olvidados y me daban una encomienda llena de ropas de niña, volví a casa de infancia y yo tenía una hija de 8 años y le daba la ropa.
Luego llegaba la Ximena, mi hermana (39) y se había rapado al cero. Comenzaba a molestar a mamá y yo le decía que no webiara si ella no trabajaba hacía más de 10 años y se enojaba, sentía que me quería pegar, me iba de chora diciéndole pegame po, eso querí, pegame a ver. No me pegaba, pero yo me abalanzaba sobre ella y a quien le pegué no era ella sino un hombre, no sé quién era pero le agarraba la cabeza y lo golpeaba hasta cansarme contra el suelo hasta ver la sangre.

sábado, 13 de agosto de 2011

a eme

Mornita, tiene un soporte? la quiero lograla con el acceso y la morna me enamorena, está record. chao.

:)

gané a la chucha.

lunes, 8 de agosto de 2011

un momento para un recuerdo

Y es que bajamos a la cocina, mientras me ordeno un poco el día.
Me mira desconfiado desde su perspectiva de 4 ruedas y escuchamos a los maestros que están en el pasillo reconstruyendo la chueca estructura que nos dejó el terremoto, uno golpea enérgico el martillo, el otro pica que pica y un tercero canta: Tus besos son, como caramelos caramelos... y la goza , pareciera que el carrete estuvo bueno y que esa canción es lo que más trae latente para distraerse del laburo tan aburrido de día lunes, trae su ritornelo, quién aguanta.

Mientras lavo la loza lo miro de reojo, lo veo atento mirando la bolsa del pan, con la boca abierta y los ojos de sorpresa ... le conversa, le salen los agú y miro su lengua blanca de leche y me rio en silencio.

Se asustó, le doy sus vitaminas y se pega con las frutas, las mira y se rie, rie y llora, puta las peras.
Te gustaba más mirar el pan y lo devuelvo al punto de partida y se queda sin expresión, le pongo la canción de las olas gigantes que tanto disfrutamos bailar y se pone somnoliento, la bolsa lo hipnotiza,quiere y no, se resiste, ahí va. Lo logró.

Lo amo, con la vida.

sábado, 6 de agosto de 2011

yo no soy freak, soy de verdad.

y que le pique el hoyo a cualquiera, no tengo nada qué aparentar.

lunes, 18 de julio de 2011

ñaws

Hoy fui a comprar un montón de lanas a la distribuidora, me fui raja como caballo de carrera. Al llegar me dio un nervio porque a las distribuidoras de lanas van puras viejas zorras, secas pal tejido que piden todo por docena y hasta se llevan telares de los más grandes para hacer alfombras o ponchos, las ropas que se ponen son hechas por ellas mismas y siempre me encuentro con algún punto que no me sé; Lo bueno es que si preguntas siempre están dispuestas a enseñarte, lo malo es que son demasiado buenas para conversar y yo ahora ando sin tiempo.

Me costó salir de ahí, y es que mi imaginación camaleónica con cada color se pierde y demora volver. Al irme vi en la vitrina unos amigurumi de patito, un elefante rosado y un pulpo turquesa, les tomé hasta una foto.

Me fui por entremedio para acortar el camino y pasar por las veredas mendigando un poco de zol, porque salí con el pelo mojado y de pronto me atacaba el frío. Vi a tres gatos, más lindos, el primero que vi era un gooordo blanco con negro que más bien parecía una vaca y era harto conversador pero esquivo, yo le hablaba, el me respondía y cuando me acercaba se ponía quisquilloso y no me dejaba acariciarle . El segundo era rico, amarillo con blanco de orejas puntiagudas muy peludas, no tenía más de un año y tomaba un poco de zol en el ante jardín de su hogar. El ultimo que vi estaba en el balcón de un tercer piso, blanco entero que me remembró a Merlina, se veía pleno.

Es nice llegar y agarrarle la cola a la Rita antes de que se me enreden los dedos.

sábado, 16 de julio de 2011

Rodrigo

Soñé contigo, y aunque no me quieras ver por hacerte doler ausencias, te traigo cerca igual aunque sea por un rato.

Te traigo vestido de cuero, con tu sonrisa contagiosa, con abrazos desos para perderse de contento y con todo ese ritmo para bailar lejos de casa.

Oye Rodrigo, ya es mucho tiempo.

Quiereme, que me pongo gris y soñarte no me basta.

viernes, 15 de julio de 2011

Clavel

Mientras iba caminando por Lo encalada, atravesando Salvador sur, venían caminando de frente hacía mí dos viejitas sosteniendose una a la otra, pidiéndole permiso a un pie para poder mover el otro y entre las dos hacían la coreografía de un cien pies para poder avanzar.

En cuanto nos alineamos, sentí olor a muerte.

Durante todo el camino hasta llegar al servipag pensé en todas las veces que había sentido ese mismo olor.

domingo, 10 de julio de 2011

Human being


En el 719, al lado de pez-gato, cruzando Av. Grecia ( vereda sur a norte), justo al frente del seminario, yace el ciruelo aquel que en su misticidad hace comportar al ser de la forma más insólita. Ha sido lo más cercano al Aleph que he visto hasta mi hoy.















* la soledad de por esos días en que flashié un sin respiro de la vida, terminó por contagiar a mi compañera Bluberry. Ya sé.

sábado, 9 de julio de 2011

viernes, 8 de julio de 2011

Puta

Que es penca cuando te cuentan la verdad tan tarde, cuando han pasado los años y muchos recuerdos ya bailaban la danza del olvido.
Es como encontrar en el desorden la pieza del rompecabezas que se cayó quién sabe dónde y nunca más encontraste, pero aparece después de mucho tiempo, el deseo emerge de las entrañas porque la ultima pieza siempre es la más placentera y vas a termino, ves el cuadro y por fin entiendes que aunque siempre te lo imaginaste terminado sólo era eso, un supuesto y como tal inexistente.

Me entregaron la ultima pieza que perdí en la infancia, miro el cuadro y me posee una pena negra.
Aun no sé si enmarcarlo y colgarlo, o bien, quemarlo e intentar olvidar lo que sería tan absurdo como barrerlo y meterlo bajo la alfombra y pretender que la protuberancia es tan sólo una ilusión óptica.

Honestamente me gustaría fuera un mal sueño, pero no se va, no se irá.
Me queda esperar por tiempo, porque cuando avanza muchas cosas duelen menos.

Quedarse en pana

Me dio anemia, mi doctor me recomendó comer panas. Comí cuando era chica, y ahora que me creo grande no recuerdo que no me gustaran, hoy me gustan. Si me quedo en pana elevaré mi , no me saldrán músculos ni me volveré rubia porque "soy grande y tengo dientes", supongo me basta.


Quedarse en pana

En cuanto que mi padre supo que me dio anemia y que me recomendaron comer panas se fue al matadero y me trajo sabrá judas cuantos kilos. Me lo comí todo lo antes posible, me daba cosa abrir el refri y verlas congeladas al lado de la caja de helado tricolor.

Quedarse en pana

Qué asco! - deben pensar los veganos y vegetarianos.
más asco me dan ellos aveces, solo aveces, porque la mayor parte del tiempo me inspiran ternura por ir en contra del salvajismo puro, ése que a mi me encanta porque prefiero comerme la otredad que convertirme en una autófaga de mierda.

Quedarse en pana

Entendiendo por esta vez pana como el hígado del animal. Así que:
- Mi pana! no piense que esta pana me la comería si me quedara en pana ni tampoco para bebermela ni para tejer la pana que tan linda te quedó.

No, pa' na'.

sábado, 2 de julio de 2011

vi NO!

Cumpliré un año sin tomarme un copete y ya me está temblando la mano, la lengua, el pecho, el corazón y la tripa. Levemente aparece el tic nervioso que me contrae el párpado y me enchueca la boca, más cuando me cae encima la noche y las patas se enfrian.

dioz, que sea diciembre que ya no me aguanto. Que llegue diciembre con los babas, con calor y con harto escándalo.

lunes, 30 de mayo de 2011

Sayayay






Saydok
es un pokemón, un pato o un ornitorrinco, no sé bien, pero ese es su aspecto.
Tiene poderes psiquicos, y cuando se va mucho en la volá de usar su super poder le agarra una
jaqueca horrible.
Es gracioso verlo en su dolor, se mueve de un lado a otro sin sentido, ambas manos agarrando su cabeza y gritando descontroladamente sayayay sayayaydok.

Tuve una compañera en la enseñanza media que sufría de jaquecas, mi compañera era la típica gorda simpaticona, rubia, lozana y mamona. Le apodamos Saydock, todo en ella calzaba perfecto en ese perfil pokemonístico y cada vez que le venía su grande mal para nosotros venía el grande show de burlas.

La crueldad se pegotea al cuerpo junto con la enorme sed de mal cuando uno es púber, no culpo, es inherente al ser.

El viernes pasado me agarró por vez primera una jaqueca, me tiró al sillón, a la cama, a tres sillas, a llorar, a la queja, a subir y bajar la escalera como buscando entremedio de cada peldaño la cura de mi procesión. Lo que es peor, al reducirme al susto me tiró a las 5 de la madrugada a una urgencia médica.

Al volver derrotada a la cama pensé en ese pato, en mis burlas teenager estúpidas, en lo terrible que debe de ser jaquecosa en lo cotidiano de la vida y que, por suerte, si me vuelve a ocurrir algo así al menos yo podré estirar la mano al velador y tomar un par de paracetamol, porque sé que todo terminará ahí.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Me enoja.

Me enoja enormemente que una persona embarazada tenga que mendigar un asiento en el transporte publico, que a algunos les pese tanto el culo como para mirar ventana afuera simulando un "no me entero".
Que a principio me daba vergüenza cargar una panza y molestar a los demás, y ahora me avergüenzo de mi misma por pensar tal brutalidad.

Qué mierda,y tal como encaró la otra vez un caballero que se indignó porque nadie me dio el asiento, les repito: ¿Qué te pasa conchetumare, te levantaste cansado acaso?

lunes, 18 de abril de 2011

Sentir miedo


Anoche cuando me acosté me puse a pensar en el poco tiempo que me queda para enfrentarme a un dolor que desconozco, cuático, porque el dolor más intenso y tangible que he sentido es el de una muela que se me infectó cuando era cabra chica y grité como un becerro cuando la extrajeron y cada noche en la que no pude dormir pensaba: este dolor no se lo doy ni a mi peor enemigo. ¿cachai?

urguetié entre mis dolores como para compadecerme, buscar latentes y decir:

debe ser más doloroso que tener la muela cariada, que ésta se infecte y que la infección te llegue al nervio, debe ser más que una fractura en la muñeca, más que tu pololo de la infancia te diga que ya no más porque se ha dado cuenta que es homosexual, más que la benzatina con penicilina, más que el riñón dañado, mucho más de lo que duele descubrir que tu padre te ha leído el diario de vida ( y que varios años después se repita el mismo gesto pero en otra persona), más que un botellazo en la cabeza, más que la cacha de una pistola en la cabeza, más que ver a tu mascota muerta, más de 20 veces de lo que duele saber que te han cagado... más de lo que duele un clavo en la planta del pie, que te caiga ají en el ojo o quedar postrada en cama de dolor de útero y así seguí.

Entonces, entre lo que se me venía en mente y las ganas de no querer pensar me arropé tapándome la cabeza ingenuamente, bajo las sabanas se sigue pensando igual, fue peor... sentí miedo, porque se hace grande en la medida que los días me chocan el cuerpo y porque es algo por lo que no he pasado y que, en definitiva, todos los posibles que sentí antes se convertirán en rasmillones cuando esté sosteniendo entre dientes la repetición en ritornelo hasta decantarlo al grito del gran grande gran :

Conchesumadre, m e p a r t o.

sábado, 9 de abril de 2011

Little white lies


To roll a joint it no es necesario inventarlas, better keep breath y alistarse en el sillón, invocar la ventana, la madera y el sabor a tierra.

Qué más, no quiero nada más. Luego me dan ganas de andar a pata pelá, soltarme los cabellos y bajar los hombros en la posición que se merecen estar.

viernes, 8 de abril de 2011

visión


Más bien fondo color café y aire tibio, su cara en mi pecho, sus ojos grandes grandes atraviesan los míos y yo me sorprendo... y yo me sorprendo, y yo me sorprendo ( y ahora me sorprende pensar que la capacidad de asombro no se había muerto), y yo me sorprendo y salto, me asusta como un peek a boo y se ríe exquisitamente de mí.

Recordar al despertar su risa, sus ojos grandes grandes. Recordar suspirar para que la emoción no se vaya por el camino viejo.

jueves, 31 de marzo de 2011

Liebre de marzo

Pasaste por marzo a paso de tortuga, qué grosera!

domingo, 27 de marzo de 2011

tru lu lú

Cuando yo tenía 12 años y estaba cursando el 7mo básico me compré en el kiosco del colegio un helado trululú, acompañada de mi en ese entonces amiga y compañera marce.
En cuanto abrí la boca para zamparme el helado sentí crujir mi mandíbula y quedarse desencajada. Sin siquiera alcanzar probar bocado me puse hacer sonidos de chimpancé porque no podía cerrar la boca, no podía modular, no podía dejar de babear y me puse raja a llorar.
Entonces la escena era absurda y chistosa, la Marce me agarraba del brazo tratando de ayudarme porque no comprendía bien qué pasaba, tan sólo me veía babear y llorar, y yo tan sólo babeaba, lloraba y veía cómo se me derretía el helado y mi mano quedaba pegajosa.

A la oficina me llevó, la señora Juanita (la directora del colegio) al verme así tampoco entendía nada, y todo era absurdo otra vez y su cara solo me mostraba compasión frente a tal cuadro bizarro y húmedo que ella veía.

Menos mal que a la vuelta estaba el consultorio y me llevaron volando a urgencia mientras tomaban contacto con mi mamá. Cuando llegué al consultorio el doctor puso la misma cara que vi primero a la Marce y después a la dire.
Me agarró la cara con sus dos manos y me dijo : quedate quieta.
yo me quedé entera tieza y lo miraba con estos ojos gigantes que tengo, rogándole con la mirada que curara mi mal.
me zamarreó de tal forma que volvió a crujir la mandíbula y pude volver a cerrar la boca.

Luego del evento tuve que ir a sesiones de maxilofacial 1 vez por semana, usar una placa traslúcida al dormir y juro que nunca más en la vida volví a comprarme un trululú.