semanita

que me la empezé el lunes haciendo salud feliz porque conocí a Amaranta, qué pedazo de mina es y yo me puse contenta porque me sentí afortunada en la vida de cruzarme por su pieza y su sonrisa y sus ojos que se le pusieron chinitos rojitos de contenta y de salud en salud y que me concediera el baile de los auténticos decadentes. mientras me meneaba envinada la miraba y le cantaba: a mi me volvió loco tu forma de ser... y ella se reía, jaja, era una declaración del amor que le tuve a primera vista.

¿Y el martes? la verdad no recuerdo, lo veo tan lejano ya si es que lo miro desde éste mi domingo que no me permite pensar. Creo recordar que mientras miraba por la ventana desde el 5to piso la gente pasando por Teatinos me invadió una cierta nostalgia y suspiré bien hondo porque recordé a Felipe y me pregunté un qué estará haciendo, una afirmación de que lo extraño y una negación rotunda frente a un posible encuentro. Entonces me rasqué la cabeza como queriendo sacarme lo pensado y me puse hacer cualquier otra cosa.

Sé que el miércoles fui a la marcha, que pensé que era ketchup el ají y de estúpida lo apreté torpemente al darme cuenta y saltó lo picoso directo a mi ojo , wa! si me picó hasta la materia gris y no podía parar de llorar, y mientras me comía la sopaipilla pasando por frente de la moneda lloraba de rabia y de ridícula, y les decía a los chicos qué mierda, ahora sé lo que es tener ají en el ojo . Probé las famosas Quilmes que no me gustaron ni un carajo; me hicieron recordar algún verano en que la dosis era un par de doradas y un paragua. Más mala la wea. además la resina me pegó re fuerte que pensé todo el rato que yo no estaba ahí y que me había escondido bajo la cama.

el jueves me fui al cine arte alameda, después me tomé unos pitcher de kunstmann y me quedé re motivada con ganas de ir a tomar mojitos al Station, y mientras subía la escalera dije en voz alta: a ver, con qué personaje me voy a encontar. En cuanto terminé de decir eso la vista panorámica se quedó fija y se me arrancó entre la carcajada un GRACE! wajaajajajaja, que estaba toda michelada con el amiguito bocón. Y ahí pelamos cable un rato, a mi me entró agua al bote, ahora que lo pienso debí haberme tomado un sólo mojito para sacarme el empacho que tenía, el segundo no recuerdo haberlo disfrutado, me perdí , me subí al barquito del mareo.

Al rato estaba con josiño y claudio metida dentro de un hostal cerca del Vox populy viddeando los terrones de azúcar que bañaron en lsd.

Llegando al forestal ya me subió el azúcar y al mirar a la otra esquina donde empieza el parque Bustamante apunté con el dedo y dije: cuando llegué allá no me voy a poder las patas.

Cuando llegué allá ni recordaba lo que había pensado ni dicho y se me movía el parque, el caminito amarillo de meandros me poseía las piernas y yo las hacia sonar mientras literalmente arrastraba las patas como lo hacen los niños amurrados que se niegan a seguir caminando. Me agarré de la reja interminable que está bordeando la cancha de los chicos con patineta y no me quería soltar, me aferraba con fuerza y posaba mi mejilla para hacerle un cariño al fierro que estaba tan heladito rico, y el viento no bastaba, pensé en la brisa del mar mientras cerré los ojos por no sé cuánto rato y me arrodillé en el pasto y lo tocaba como si fuera la primera vez y cedí entera al suelo mientras ponía la mejilla nuevamente para acariciar el pasto y rodé, rodé rodé entregada a la gravedad hasta que conseguí pararme para cruzar el juego de las escaleritas que tanto vertigo me daba cuando era una niña. Al pasarlo me sentí contenta y vi a josiño tirado en la arenita haciendo angelitos y me encantó, no oculté las ganas de querer hacer lo mismo y arena se me metía al zapato y era rico.

Después tuve una laguna mental, wajajaajaj, sólo recuerdo que entramos a la bomba que está en av matta con vicuña y compramos 4 red bull, un tarrito de papitas fritas de ciboulette y nos sentamos a reirnos de la gente que pasaba. La red bull rara me puso, me sentí jalada, dura y tieza. Al rato me bajó el sueño y dormí dormí o pensé que estaba durmiendo pero no lo estaba y cuando desperté estaba pensando puras tonteras y dije: no, no señor, esa es la fecha de vencimiento. y al darme cuenta de lo que se me arrancó de la boca me llevé las dos manos y me la tapé y sentí una euforia extraña, bien parecida a la que siente Beatrix cuando está al otro día de haberse pitiado a Bill tirada en el piso del baño del hotel mientras su hija ve tele y está en trance de risa y llanto, llorando sin pena porque la risa no se lo permite. Así yo muerta de risa en la cama, moviendome de allá para acá intentando controlar la situación y sintiendo por josiño un cariño de aquellos de cuando te ganas un amigo de la vida.

Fue esa mañana cuando dimensioné lo que es un trip, lástima haberme tirado sólo la mitad y no haberme entregado al viaje por completo. De a ratos me pega nuevamente el impulso a nivel neuronal y me gusta, me quedé sin hambre, sin ganas de fumar nicotina, sin ganas de beber, con hartas ganas de follar y con las ganas de volver a tripiar en la dosis legal, en la playa y un día primaveral con compañeros que se vayan así en la mera mera sin miedos.

way, y me quedé en el viernes y ya es domingo y la caña me la gana, en un depa en Santa Lucía, en un noveno, sola, aun en pijamas mirando al gato tomás cómo duerme, pensando en que si los días me pasaran la cuenta pagaría lo que debo, dejaría la propina, me pondría los lentes de zol y me iría a vivir playa hasta pedir la nueva cuenta. Cuática semana, me comporté como la loca que vive su día a día como si fuera el ultimo, y es que pasan cosas todo el tiempo y el devenir me atrapa en de- venir en venir y yo voy, allá voy.