miércoles, 25 de mayo de 2011

Me enoja.

Me enoja enormemente que una persona embarazada tenga que mendigar un asiento en el transporte publico, que a algunos les pese tanto el culo como para mirar ventana afuera simulando un "no me entero".
Que a principio me daba vergüenza cargar una panza y molestar a los demás, y ahora me avergüenzo de mi misma por pensar tal brutalidad.

Qué mierda,y tal como encaró la otra vez un caballero que se indignó porque nadie me dio el asiento, les repito: ¿Qué te pasa conchetumare, te levantaste cansado acaso?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece, a mi me paso lo mismo
Dominique Islas